Un vuelo de Avianca que cubría la ruta entre Bogotá y Madrid, operado en un Boeing 787, declaró una emergencia general con el código 7700 mientras sobrevolaba el Océano Atlántico. El avión, identificado como vuelo AV46, descendió hasta una altitud de 10,000 pies antes de desviarse hacia el aeropuerto de Ponta Delgada, en las Islas Azores, Portugal.
Si bien no ha habido una declaración oficial por parte de la compañía de aviación, se especula que esta maniobra de descenso podría estar relacionada con un problema en el sistema de presurización de la cabina. Cabe señalar que, ante una situación de este tipo, los pilotos deben llevar la aeronave a una altitud más baja para asegurar niveles seguros de oxígeno para pasajeros y tripulación.
Al dirigirse hacia las Azores, el avión puede efectuar un aterrizaje seguro en una ubicación cercana dentro del Atlántico, lo que reduce los riesgos y facilita una rápida intervención. En el avión se encontraba a bordo una popular presentadora panameña, Mónica Díaz Linares, quien relató toda su experiencia en este vuelo que declaró y aterrizó de emergencia.
Entre otras cosas, destaca que la tripulación manejó la emergencia de una manera efectiva. Afirma que el momento de crisis y caos comenzó, para los pasajeros, cuando les cayó la mascarilla de oxígeno de manera repentina. De acuerdo con su experiencia, aunque vio a mucha gente estresada por la situación, algunos en llanto, el avión pudo descender sin mayor complicación.
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