El Vaticano publicó un documento en el que analiza los efectos de la Inteligencia Artificial (IA) en distintos ámbitos como la educación, la economía, el trabajo y la seguridad. En él, se alerta sobre el poder que tienen unas pocas empresas sobre esta tecnología y los riesgos de su uso para manipular la opinión pública o aumentar la desigualdad.
El informe, titulado “Antiqua et Nova”, cuestiona que el desarrollo de la IA esté controlado por unas pocas empresas con gran influencia. Según el texto, esto facilita que la tecnología sea utilizada con fines de manipulación política, intereses privados o para generar desinformación mediante imágenes y videos falsos creados con IA.
¿Qué otros puntos trata el documento?
Aunque el Vaticano reconoce que la IA puede hacer que la educación sea más accesible, también advierte que muchas herramientas educativas basadas en esta tecnología solo dan respuestas rápidas sin enseñar a los estudiantes a buscar soluciones por sí mismos. Esto podría afectar su capacidad para desarrollar un pensamiento crítico y llevarlos a aprender de manera superficial o con información incorrecta.
Otro de los puntos que preocupan es el uso de la IA en el desarrollo de armas autónomas. Se advierte que esto podría facilitar conflictos armados sin control, impulsando una carrera armamentística con consecuencias peligrosas.
En su conclusión, el Vaticano afirma que la IA debe usarse como una herramienta para ayudar a las personas, no para sustituirlas, y hace un llamado a regular esta tecnología para evitar efectos negativos en la sociedad.