Un total de 157 delfines quedaron varados en una playa remota de Tasmania, lo que movilizó a expertos en vida silvestre y veterinarios para intentar rescatarlos. Sin embargo, tras varios intentos fallidos, las autoridades ambientales determinaron que la mejor opción era aplicarles la eutanasia.
Esta fue la postura de las autoridades
Autoridades de la zona informaron que, aunque 90 delfines aún seguían con vida hasta la tarde del miércoles, su estado era crítico. El largo tiempo que estuvieron expuestos al sol y los fuertes vientos los mantenía en una situación de estrés extremo, lo que hacía imposible su rescate.
Este suceso es poco común en esta región
Autoridades en materia de vida silvestre de la zona, destacaron que este es el primer caso de varamiento masivo de falsas orcas en la zona en 50 años. Estos cetáceos, que pueden medir hasta seis metros de largo y pesar entre 500 kilos y tres toneladas, son conocidos por su fuerte vínculo social y suelen desplazarse en grandes grupos.
Hubo complicaciones en las labores de rescate
Los expertos señalaron que las condiciones del lugar complicaron las labores para su rescate. La playa donde quedaron atrapados, cerca de la desembocadura del río Arthur, es de difícil acceso, lo que impidió trasladar el equipo necesario para salvarlos.
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