Desde pequeña ayudaba a su mamá: conoce la historia de Carmen, una mujer emprendedora
Carmen creció ayudando a su mamá y hoy, gracias a su perseverancia, logró cumplir su sueño de tener su propio negocio de comida.
Ella es Carmen, quien desde pequeña supo lo que era trabajar, ya que vivió momentos difíciles al lado de su mamá y hermanos. Las circunstancias hicieron que ayudara en los quehaceres del hogar, conocimientos que en un futuro le sirvieron para emprender un negocio de quesadillas y gorditas.
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María del Carmen Ramírez Rivera, emprendió su negocio
“Pues mi mamá me enseñó a hacer los guisos, comida y todo eso. Mi mamá se dedicaba a hacer tortillas desde hace muchísimos años para sacarnos adelante a mis hermanos y a mí, ya que mi papá nos abandonó. Entonces, yo empecé como a los nueve años a hacer tortillas, hacer gorditas para poder ayudar a mi mamá.”
No ha sido fácil, pero no hay imposibles
El camino aún era largo, pero su fuerza era imparable. Con la ayuda de su familia, logró cumplir sus sueños y así llevar el sustento a casa. La preparación de cada platillo, utilizado para poner sobre la tortilla o dentro de las gorditas, es de un sazón único.
María Luisa Ramírez Rivera, hermana de Carmen:
“Pues le ayudamos. Realmente, ella tiene va a cumplir un año que emprendió su negocio de gorditas y quesadillas fritas. Le ayudamos prácticamente con lo que son los guisados. Maneja varios guisados, que es el huitlacoche, champiñones, carne deshebrada en salsa roja, costillita en salsa pasilla, bistec en salsa verde.”
Hace lo posible por mantener su negocio
Emprender un negocio no es nada sencillo, pero cuando se tienen las ganas y la necesidad de salir adelante, se vale hacer de todo para mantenerlo. Así se alcanzan metas y anhelos que a veces se quedan pausados, en espera de que alguien nos impulse para llevarlos a cabo.
María del Carmen Ramírez Rivera, emprendió su negocio:
“Hay veces que sí da miedo y lo piensa uno muchísimo: ‘Ay no, ¿y si no funciona?’ Pero es quitarnos eso de la cabeza porque hay que hacerlo para saber si podemos lograrlo o no. Podemos y queremos.”
María Luisa Ramírez Rivera, hermana de Carmen:
“Eso es algo que nos ha enseñado mucho mi mamá: a salir adelante. Tanto ella como yo tenemos negocios propios. Es muy bonito ver a mi hermana, que es la menor, salir adelante por su familia, más que nada por sus dos hijos y su esposo.”
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Se siente satisfecha de cumplir sus sueños
Carmen, como muchas mujeres, está convencida de que cuando se quiere, se puede. Hoy lo está logrando. Aquella niña que ayudaba a su mamá a hacer tortillas hoy cuenta con clientes que reconocen y disfrutan de los alimentos en un puesto improvisado.
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