O Yeong-Su, el veterano actor surcoreano de 79 años conocido por su papel en la exitosa serie original de Netflix, El juego del Calamar, enfrenta ahora una sentencia por acoso sexual después de que una actriz presentara una denuncia en su contra. La identidad de la actriz aún no ha sido revelada, pero sus acusaciones contra O Yeong-Su incluyen tocamientos inapropiados, como besos en las mejillas, tomarle la mano y abrazarla sin su consentimiento. El actor ha negado estas acusaciones, pero un tribunal en Corea del Sur lo declaró culpable el viernes 15 de marzo de 2024.
Como consecuencia, el actor surcoreano O Yeong-Su deberá cumplir una sentencia de 8 meses de prisión y asistir a 40 horas de educación sobre violencia sexual. A pesar de haber pedido disculpas a la actriz antes de que presentara la denuncia, ella decidió llevar el caso a los tribunales debido al daño que afirma haber sufrido. El caso salió a la luz en 2022, cuando la actriz presentó formalmente su denuncia, alegando haber sido víctima de tocamientos indebidos por parte de O Yeong-Su. Según el juez a cargo del caso, la actriz había buscado ayuda por violencia sexual en 2018, pero fue el éxito de El Juego del Calamar en 2021 lo que la llevó a exigir una disculpa pública al actor.
A pesar de su disculpa, el actor surcoreano O Yeong-Su se defendió en declaraciones a la cadena coreana JTBC, argumentando que su intención al tomar la mano de la actriz fue simplemente orientativa. El papel de O Yeong-Su como el Jugador n.º 001 en El Juego del Calamar lo catapultó a la fama internacional, convirtiéndolo en el primer surcoreano en ganar un Globo de Oro y obteniendo una nominación al Emmy en 2022 como actor secundario en una serie dramática. Aunque no participará en la segunda temporada de la serie, su legado y la discusión sobre la conducta apropiada en y fuera de los sets de filmación se ven ahora afectados por este escándalo. Mientras O Yeong-Su prepara su apelación, el mundo observa con atención cómo este episodio influirá en su carrera y en el debate sobre la ética en la industria del entretenimiento.
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