En México se usa el bombardeo de nubes, ¿podría llover tanto como en Dubái?

Las lluvias en Dubái han sido calificadas por los expertos como extremadamente inusuales en la historia climática del país. Además, diversos videos evidencian todo el caos y estragos que estas generaron. Se presume que este escenario se derivó del bombardeo de nubes , utilizado desde hace tiempo en diversos puntos del país para generar lluvias en tiempos de crisis.

Ante este escenario, surgen dudas que atañen a nuestro país, en donde también se utiliza el bombardeo de nubes y más en esta época de sequía por la que estamos atravesando. Así que… ¿en México podría pasar el mismo caos climático que en Dubái? Veamos algunos puntos relevantes que podrían responder, al menos parcialmente, a esta pregunta.

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La técnica conocida como bombardeo de nubes o siembra de nubes es un proceso complejo y es importante saber que no todas las nubes son aptas para ello, pues es necesario realizar estudios previos para determinar el momento adecuado para llevarlo a cabo.

El proceso comienza con una aeronave que sobrevuela el cielo, cargada con una mezcla especial de yoduro de plata sobreenfriada y una solución de acetona colocada en una bengala. Esta mezcla es dispersada sobre las nubes, las cuales deben tener una alta humedad para que el bombardeo sea efectivo.

El yoduro de plata actúa como un agente de nucleación, promoviendo la condensación del vapor de agua presente en las nubes y facilitando la formación de gotas de lluvia. La finalidad del bombardeo de nubes es influir en el proceso natural de formación de precipitaciones, aumentando las probabilidades de que se produzcan lluvias en áreas específicas.

Esta práctica se ha utilizado durante décadas en todo el mundo para enfrentar situaciones de sequía o para disipar nubes que puedan generar fenómenos meteorológicos adversos como granizo o tormentas severas.

La problemática de la escasez de agua en el país ha generado un intenso debate sobre la preservación de este recurso. Ante este desafío, se han implementado diversas estrategias para enfrentar la situación, entre las cuales destaca el uso del bombardeo de nubes en México como una técnica para inducir precipitaciones y así reabastecer las presas que abastecen diversas regiones del país.

Al respecto, es importante tener en cuenta que las nubes se forman cuando el aire ascendente se enfría hasta alcanzar un punto en el que la temperatura condensa el vapor de agua contenido en el aire. Para llevar a cabo el bombardeo de nubes en México, entonces, se utilizan aeronaves de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) y de otras entidades públicas y privadas que se han sumado al proyecto. Estas aeronaves están equipadas con aspersores y tanques de presurización.

De esta forma y según datos oficiales, el bombardeo de nubes en México ha logrado incrementar la caída de lluvia entre un 35 % y 60 % en áreas donde se ha aplicado esta técnica. En México, esta práctica se ha implementado desde 2012, principalmente en estados como Monterrey, Baja California, Chihuahua, Coahuila, Durango, Sinaloa y Sonora, que han enfrentado graves sequías.

Tan solo durante el año 2023, el programa se aplicó en 10 polígonos de atención ubicados en regiones que enfrentan estrés hídrico en estados del centro, norte y oeste del país, como Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Durango, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Zacatecas, entre otros.

Actualmente, en 2024, el programa de bombardeo de nubes en México se está preparando para generar lluvias, por ejemplo, en Michoacán. Este proceso podría abarcar hasta seis millones de hectáreas, con el objetivo de hacer frente a los problemas de sequía y garantizar la producción agrícola en la región.

A pesar de los logros demostrados en algunos casos, la efectividad del bombardeo de nubes puede variar según las condiciones atmosféricas locales y la disponibilidad de nubes adecuadas. Además, existen preocupaciones legítimas sobre los posibles efectos secundarios y ambientales de esta práctica.

Estas preocupaciones incluyen la contaminación del agua y del suelo, el impacto en la salud humana y la interferencia con los ciclos naturales del agua y el clima, lo cual puede desencadenar tormentas atípicas y severas como las acontecidas en Dubái durante los últimos días.

El bombardeo de nubes es, pues, una técnica controvertida que busca aumentar la precipitación y alterar el clima en ciertas áreas. Aunque puede brindar alivio temporal a las regiones afectadas por la sequía, su efectividad a largo plazo y su impacto ambiental requieren un análisis cuidadoso y una evaluación completa de los posibles riesgos y beneficios involucrados.

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